Biblia King James Version
Isaías 60:
- Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti.
- Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y tinieblas los pueblos; mas sobre ti nacerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria.
- Y los gentiles vendrán a tu luz, y los reyes al resplandor de tu amanecer.
- Alza tus ojos alrededor, y mira: todos se reúnen, vienen a ti; tus hijos vendrán de lejos, y tus hijas serán amamantadas a tu lado.
- Entonces verás y fluirás a una, y tu corazón temerá y se ensanchará; porque la abundancia del mar se convertirá en ti, las fuerzas de las naciones vendrán a ti.
- Te cubrirá multitud de camellos, dromedarios de Madián y de Efa; todos los de Sabá vendrán: traerán oro e incienso; y anunciarán las alabanzas del SEÑOR.
- Todos los rebaños de Cedar se juntarán para ti, los carneros de Nebaiot te servirán; subirán con aceptación sobre mi altar, y yo glorificaré la casa de mi gloria.
- ¿Quiénes son estos que vuelan como nube, y como palomas a sus ventanas?
- Ciertamente las islas me esperarán, y las naves de Tarsis primero, para traer a tus hijos de lejos, su plata y su oro con ellos, al nombre de Jehová tu Dios, y al Santo de Israel, porque él ha te glorificó.
- Y los hijos de extraños edificarán tus muros, y sus reyes te servirán; porque en mi ira te herí, pero en mi favor tuve misericordia de ti.
- Por tanto, tus puertas estarán abiertas de continuo; no se cerrarán de día ni de noche; para que los hombres traigan a ti las fuerzas de los gentiles, y sus reyes sean traídos.
- Porque la nación y el reino que no te sirvan, perecerá; sí, esas naciones serán completamente devastadas.
- La gloria del Líbano vendrá a ti, cipreses, pinos y bojes juntamente, para embellecer el lugar de mi santuario; y haré glorioso el lugar de mis pies.
- También los hijos de los que te afligieron vendrán inclinados hacia ti; y todos los que te despreciaron se postrarán a las plantas de tus pies; y te llamarán; La ciudad del SEÑOR, la Sión del Santo de Israel.
- Mientras que has sido abandonado y odiado, de modo que nadie pasó por ti, te convertiré en una excelencia eterna, un gozo de muchas generaciones.
- Y mamarás la leche de las naciones, y el pecho de los reyes mamarás; y sabrás que yo, el SEÑOR, soy tu Salvador y tu Redentor, el Fuerte de Jacob.
- Por bronce traeré oro, y por hierro traeré plata, y por madera bronce, y por piedras hierro; haré paz a tus oficiales, y justicia a tus exactores.
- No se oirá más violencia en tu tierra, devastación ni destrucción dentro de tus fronteras; pero a tus muros llamarás Salvación, ya tus puertas Alabanza.
- El sol no será más tu luz de día; ni el resplandor de la luna te alumbrará, sino que el SEÑOR te será por luz eterna, y tu Dios tu gloria.
- Tu sol no se pondrá más; ni se apartará tu luna, porque el SEÑOR será tu luz eterna, y los días de tu luto se acabarán.
- También tu pueblo será todo justo; para siempre heredarán la tierra, renuevo de mi plantío, obra de mis manos, para que yo sea glorificado.
- El pequeño se convertirá en mil, y el pequeño en nación fuerte: yo, el SEÑOR, lo apresuraré a su tiempo.